LA DONACIÓN DE
MIS ÓRGANOS, Camilo José
Cela, España
Quiero el día que
yo muera
poder donar mis
riñones,
mis ojos y mis
pulmones.
Que se los den a
cualquiera.
Si hay un
paciente que espera
por lo que yo
ofrezco aquí
espero lo hagan
que así
podrán salvar una
vida.
Si no puedo
respirar,
que otro respire
por mí.
Donaré mí corazón
para algún pecho
cansado
que quiera ser
restaurado
y entrar de nuevo
en acción.
Hago firme
donación
y que se cumpla
confío
antes de sentirlo
frío,
roto, podrido y
maltrecho
que lata desde
otro pecho
si ya no late en
el mío.
La picha yo
donaré,
que se la den a
un caído
y levante poseído
el vigor que
disfruté.
Pero pido que
después
se la pongan a un
jinete,
de los que les
gusta el brete.
Sería eso una
gran cosa
yo descansando en
la fosa
y mi picha dando
fuerte.
Entre otras
donaciones
me niego a donar
la boca.
Pues hay algo que
me choca
por poderosas
razones.
Sé de quien en
ocasiones
habla mucha
bobería;
chupa lo que no
debía
y prefiero que se
pierda
antes que algún
comemierda
mame con la boca
mía.
El culo no
donaré,
pues siempre
existe un confuso
que pueda darle
mal uso
al culo que yo
doné.
Muchos años lo
cuidé
lavándomelo a
menudo.
Para que un
doctor boludo
en dicha
transplantación
se lo ponga a un
maricón
y muerto me den
por culo.
©CAMILO JOSÉ CELA (2016 – 2002)
Académico de
la Real Academia Española, galardonado, entre otros, con el Premio
Príncipe de Asturias de las Letras en 1987, el Premio Nobel de
Literatura en 1989 y el Premio Cervantes en 1995. Fue Miembro
Correspondiente de la Academia Porteña del Lunfardo
Clik:
En
Plaza Castilla interpretan a la Zamfoña el tema la donación de mis órganos.
Por un grupo colombiano
Para los que gustan de la corrección del idioma, les remito
esta
preciosa anécdota, joya de las sutilezas de la lengua española: (Camilo
José Cela, premio Nóbel de Literatura en 1999, fue diputado en España en
1985. )
En el Congreso se quedó aparentemente dormido, y el Presidente de la asamblea lo increpó:
- Señor Cela, ¿está usted dormido?
No, señoría. Estoy durmiendo...
- Y... ¿no es lo mismo?
- Pues no, señoría. No es lo mismo estar jodido que estar jodiendo.
preciosa anécdota, joya de las sutilezas de la lengua española: (Camilo
José Cela, premio Nóbel de Literatura en 1999, fue diputado en España en
1985. )
En el Congreso se quedó aparentemente dormido, y el Presidente de la asamblea lo increpó:
- Señor Cela, ¿está usted dormido?
No, señoría. Estoy durmiendo...
- Y... ¿no es lo mismo?
- Pues no, señoría. No es lo mismo estar jodido que estar jodiendo.
ARCHIVO de LUIS ALPOSTA, poeta y escritor
argentino
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA
Querido Norberto.
ResponderEliminarSinceramente, y aunque se trate de Cela (y sus problemas de plagio inventados o abonados), no me gustó. Para nada. Es una grosería con mal forma, incluso, de poema libre. Lamento haber leído esto. Un filósofo de mi ciudad solía decirnos: No se confundan: una cosa es el escritor y otra la persona del escritor... Cada uno es libre de pensar y actual como quiera, pero siempre del buen gusto y una ética de la conducta social. Somos seres humanos conscientes y responsables ante la Creación de lo que hacemos y no por Ella. En fin... Debe ser la pandemia que ha coronado con el Mal a muchos... Respetuosamente.-
en cambio a mi me pareció muy gracioso,me reí mucho , y me sentí reflejada, poetas que no valen nada pero que reciben mucho -ja-
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