AISLAMIENTO SOCIAL
Como
mensajera de paz desde la literatura he insistido llevar principios de amor,
respeto y armonía. Durante años junto a mis queridos hermanos en la misma
misión hemos llevado la palabra Paz hacia otros horizontes y fronteras, con
nuestras reflexiones, conferencias y poesía hemos regado muchos escenarios del
mundo con grandes resultados y satisfacciones individuales que marcaran por
siempre nuestra existencia. Hoy en este aislamiento volvemos hacia ese
importante y positivo trabajo silencioso para tratar de re pensar cómo será
este continuar desde la ética, estética y el servicio que nuestro oficio presta
a los demás. Cómo muchos me pregunto y les pregunto ¿Quiénes seremos después de
la pandemia? ¿Descubriremos en nuestro interior ese paraíso perdido?
Si
sobrevivimos a este tiempo será gracias a nuestra disciplina interna de
conservación y amor a todo lo que nos rodea, de enfrentarnos a nosotros mismos
y de vernos ¡cuánto nos conocemos!, ¡cómo evaluamos el amor al prójimo! ¡Hasta
qué profundidad fluimos en el amor universal!, porque si no revemos esto
ayudaremos que la pandemia se extienda hacia los horizontes internos provocando
ansiedad, tristeza, depresión y demás.
De algo
estoy segura: será la caída del ego, el cambio que hoy exige de nosotros es una
gran tarea de transformación hacia la autenticidad individual, cambio que
aparecerá o no, depende de cada uno y de qué manera hemos reflexionado en este
tiempo de separación, extrañeza y recuerdos , el resultado será la verdad en sí
misma, profunda, desde el alma, reconociendo al otro y su circunstancia, esa
otra alma diferente ,ingenua, apasionada, agresiva, frágil, valiente, débil ,
enfrentando la misma situación. Hoy más que nunca es nuestra tarea de re pensar
el amor incondicional, porque todas las emociones se ven presionadas, desde el
aislamiento saldremos más fortificados en ese diálogo interno. Si actuamos
desde la fuente de luz universal podremos hacerle frente a toda situación y no
destruirnos unos a otros, porque más allá de la pandemia existirán crisis
posteriores, la sed de dominio, el hambre, la falta de agua y otros posibles
cataclismos.
En la
manera que podamos, trabajemos desde un espíritu sano, genuino, atento,
observador, respetuoso, altruista y meditemos en los rezos de cada día, en
nuestro modo de hacerlo, cualquiera que sea la fe, hoy más que nunca seamos
disciplinados para aceptar la paciente tolerancia al entendimiento de cada día
desde la gozosa protección recibida desde el cielo. En este hoy al comunicarme,
ruego al mismo tiempo que todos estén bien y a salvo.
PARAISO
PERDIDO
Vendrán
los huertos vacíos
la condena
a los imprudentes
el final
para los débiles
el
recuerdo de los que ya no están
será el
cuidado del cuerpo y del alma
un rocío
de paisajes diferentes
bondad
espiritual sin frenos
si
cambiamos en amor
será el
final del ego
en la copa
de la vida
desafíos
diferentes
compasión
, enojo al mismo tiempo
el miedo,
un maestro y aprendiz
será la
época de la verdadera luz
lo
sembrado y construido
sin falsos
ídolos
esperanza
y fe
en el
paraíso perdido.
12 mayo
2020
©SUSANA ROBERTS, poeta y escritora argentina
GOBERNADORA
CULTURAL DE ASOLAPO ARGENTINA EN CHUBUT
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