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sábado, 22 de noviembre de 2025

SERÉ - Martha Inés Vélez - Medellín, Colombia

 















SERÉ


Seré el clavel o la rosa de un vergel olvidado
Seré relámpago o lluvia sobre un humilde tejado
Seré la luz o el rocío que acaricia la mañana
Seré la paz del vacío que busca espacio en el alma.
Seré el viento que estremece los cristales de mi casa
Seré el eco de un suspiro del que dice que me ama
Seré la fuga del río que sin temores se escapa
Seré el brillo de una estrella o el simple color del agua
Seré el silencio en la noche que de apacible se calla
Seré sombra de mi misma vestida de saya larga
Seré la brisa en susurro que entra por mi ventana
Seré un reflejo de sol sobre la arena mojada
Seré palabra en el verso o tañido en la campana
Seré lumbre de una hoguera o huella del ser, del tiempo o la nada
Seré la nota de un son cuando rasga la guitarra
Seré gorrión o jilguero que trina de madrugada
Seré polvo en el camino adherido a mi sandalia
Seré vuelo de gaviota que surca toda distancia
Seré la voz de mi misma que en sarcófago descansa.


Birmingham, 2 de noviembre de 2019


©MARTHA INÉS VÉLEZ, Medellín, Colombia
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

MUNDO AMOR - Hugo Luis Bonomo - Santa Fe, Argentina

 











MUNDO AMOR


Conozco tu mundo
Lo tengo en la mano
Es tan diminuto
Que cerré los dedos
y quedó encerrado
Entre los resquicios que forman mis dedos
Asoman tibiezas
Y colores áureos
Columnas de amor
Ternura y pureza
Quedan en mi cuerpo
Me atacan
Me amarga
Me hieren
Me besan

Me encanta mirarlo
Y al verlo tan quieto
Con sus ojos fijos
Sin una palabra
Sin un solo gesto
Me siento canalla
Me siento muy sucio
Maldigo lo hecho

Lo sigo mirando
Me sigo tentando
Me encierro en mi mismo
Pienso solo en mi
Grito que el amor es solo egoísmo

Ya me sobrepongo
Pienso en el pasado
Pienso en el infierno
También pienso en Dios
Y sigo pensando

Dejo de pensar
Y vuelvo a mirarlo
Dejo de mirarlo
Pienso más en Dios
Y miro mi mano
Me miro los dedos
Y los veo manchados
Espío por ellos
Y veo tu mundo
Sumiso y callado

Pienso más en Dios
Y sigo pensando

He abierto la mano.



HUGO LUIS BONOMO – Santa Fe – Argentina

CREÍA YO - Macedonio Fernández - Buenos Aires, Argentina

 







CREÍA YO


No a todo alcanza Amor, pues que no puedo
romper el gajo con que Muerte toca.
Mas poco Muerte puede
si en corazón de Amor su miedo muere.
Mas poco Muerte puede, pues no puede
entrar su miedo en pecho donde Amor.
Que Muerte rige a Vida; Amor a Muerte.

 

MACEDONIO FERNÁNDEZ – Buenos Aires, Argentina

Macedonio Fernández (Buenos Aires, 1 de junio de 1874-ibidem, 10 de febrero de 1952) fue un escritor, abogado y filósofo argentino. Célebre por su novela experimental Museo de la Novela de la Eterna, publicada póstumamente en 1967, ejerció gran influencia sobre la literatura argentina posterior, especialmente en Jorge Luis Borges y Julio Cortázar.

DEPRESIÓN - Norberto Pannone- Argentina

 











DEPRESIÓN

La séptima cruz
cayó al vacío.
Dios ha volcado
su carruaje.
El ángel, que era mío;
emprende el viaje.
Mañana y siempre
habrá otras que caen.
Un lunes, la octava
con la primera,
serán una.


NORBERTO PANNONE- Argentina

LUIS ALPOSTA - Luis Alposta - Buenos Aires, Argentina

 



LUIS ALPOSTA - Buenos Aires, Argentina

MIEMBRO HONORÍFICO Y ASESOR CULTURAL DE ASOLAPO ARGENTINA

AZAR - Alcira Cufre - Buenos Aires, Argentina









AZAR

Quiso la vida que te viera

Por azar, me cediste el paso.

Fue necesaria tu mirada

para hacer florecer los rosales

en mi corazón.

 

ALCIRA CUFRE – Buenos Aires, Argentina

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

HILACHAS - Ana Romano - Buenos Aires, Argentina

 









HILACHAS


Aciagos murmullos
alfombran las hojas

En el barro
desplumados recuerdos

Entre tules
sucumben
las hilachas.


ANA ROMANOBuenos Aires, Argentina

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA


“POESÍA MERIDIANA, ll “ - Rafael Mérida Cruz-Lascano - Guatemala

 








“POESÍA MERIDIANA, ll 

 

Por: RAFAEL MÉRIDA CRUZ-LASCANO  

poeta y escritor guatemalteco

Hombre de Maíz” 2009

SELAE, Italia: Premio Mundial a la Trayectoria, 2011.

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA


Redondillas octosilabas

A misión sin resistencia,
se responde con un sí
compromiso que antes di
seguro de mi carencia.

Mi vocación no es completa
en mi vida consagrada
siento no me faltó nada
en Dios, llena mi faceta.

Se denomina REDONDILLA meridiana, A LA ESTROFA CREADA POR EL POETA GUATEMALTECO, Rafael Mérida Cruz-Lascano. 20, marzo, 2025, Que, cumpliendo con sus normas clásicas, el cuarto verso en la última palabra… abraza, empala, asocia, vincula (en la última palabrea del primer verso.
Reacias/resistencia, = carencia/ no es completa, = mi faceta/ apostólico/ = católico/Jesucristo,= Cristo/Espíritu Santo.= 
TANTO/Inmaculada,= Llamada/Escuchad.


EL HORIZONTE DE LAS TRAJEDIAS - Floreal Rodríguez de la Paz - Alcoy, Alicante, España

 



EL HORIZONTE DE LAS TRAJEDIAS

 

Qué sueños tan fantásticos, ver que seguimos ‘naciendo’ y toma mayor vigor, cuanto se puede imaginar; sobre todo cuando se sigue certificando el horizonte de los escenarios apocalípticos. Pero: ¡Qué sabe hacer el Ser Humano! Busca lo trascendente; lo encuentra y subestima su Progreso; al ir caminando, hacia la búsqueda del Futuro Social. ¡Pero no acierta, porque “lo que es vivir”, no consigue centrar la atención en lo más hermoso, que siempre será “Una Sociedad Libre”. Para que sea posible terminar con los fabricantes de Dolor; los fabricantes de Odio; y que fabrican Fortunas, sin que la honorabilidad de los Ciudadanos honrados, deba quedar en entredicho fantasioso. ¡Los fabricantes de Tragedias son señalados con especiales fomas, porque saben diseñar sus propios intereses; esos que ‘suelen vivir en palacios’; en ‘mansiones con el poder del privilegio’; en las lujosas pasarelas, con alfombra para el ‘exhibicionismo’. Y nunca son capaces de terminar con la miseria de la tristeza; permitiendo eternizar la tragicomedia, en medio de los Círculos Sociales, donde se pueden expresar las monumentales indignas verdades que se suelen practicar, aunque siempre  represoras- hasta la fecha; aunque con toda clase de reservas. El Vicio que disfruta, porque lo practica permanentemente “la Alta Alcurnia”, evidencia ‘lo más miserable de las humanas costumbres. El horizonte de las Tragedias, pone en juego constante, lo que todavía no se sabe desvelar -desde la responsabilidad política-; ya que no se sabe enmendar, “tal vez por que en el forcejeo”, se pierde la brújula de la existencia. Los Humanos ‘no saben vivir su propia realidad’; sobre todo desde la que deben transmitir, enseñar y proteger para conservar la Vida; a pesar de las dificultades que surgen mientras se van conociendo los nuevos caminos; que en definitiva, se deben ‘conquistar, superando los escenarios desapasionados, en cada situación advenediza. Es un lujo que se permiten los Humanos, desde que salen de la Cuna: Y se protegen, con la costumbre constante, unos de los otros; porque “son demasiadas dudas”, que despiertan cada día; y suelen poner precio a todo lo que hacen; por que siempre hacen de ‘lo privado’, un proyecto prometedor; poniendo alto nivel en las luchas que desarrollan, casi siempre en los campos del enfrentamiento. En el horizonte humano se encuentran las grandes aventuras; despertando todos los riesgos; viviendo las mayores rutinas ‘sin sentido común’. ¡No acierta el Ser Humano a vivir “en Paz”! Se pasa toda la Vida huyendo de si mismo. No logra escapar de “sus propias maldades”. Y “algunos”, dedican demasiado tiempo a rezos divinizados, sabiendo que son promesas baldías. 

Noviembre ******* 2025


Nunca sale de raíz
una pasión encendida;
que en el
hombre más feliz,
aunque se sane la herida,
se queda la cicatriz.

 

 FLOREAL RODRÍGUEZ DE LA PAZ - Alcoy, Alicante, España

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA





 

 

 

 

 


EL CIEGO - Kate Chopin - San Luis, Misuri, EE.UU





EL CIEGO

Kate Chopin


Con una pequeña caja roja en una mano, un hombre caminaba lentamente por la calle. Su viejo sombrero de paja y su ropa descolorida daban la impresión de que la lluvia los había batido muchas veces, y las mismas veces el sol los había secado encima de él. No era mayor, pero parecía débil; y caminaba bajo el sol, por el pavimento asfaltado que abrasaba. Al otro lado de la calle había unos árboles que proyectaban una sombra espesa y agradable: toda la gente andaba por aquel lado. Pero el hombre no lo sabía, porque era ciego, y además era tonto.

En la caja roja había uno lápices que intentaba vender. No llevaba bastón, y se guiaba arrastrando los pies por los bordillos de piedra, o la mano por las verjas de hierro. En cuanto llegase a las escaleras de una casa, las subiría. A veces, una vez alcanzada la puerta con mucha dificultad, no lograría encontrar el botón eléctrico, con lo cual bajaría pacientemente y seguiría su camino. Algunas de las puertas de hierro estaban cerradas con llave, ya que los dueños estaban fuera durante el verano, y gastaría mucho tiempo esforzándose por abrirlas, pero daba igual, porque tenía todo el tiempo que había a su disposición.

A veces conseguía encontrar el botón eléctrico: pero el hombre o la criada que contestaba al timbre no necesitaba lápices, o bien no se les podía persuadir de molestar a la ama de la casa para tan poca cosa.

El hombre llevaba mucho tiempo fuera y había caminado mucho, pero sin vender nada. Esa mañana, alguien que se había cansado de tenerlo dando vueltas le regaló esa caja de lápices, y lo envió a ganarse la vida. El hambre, con sus colmillos afilados, roía su estómago y una sed implacable resecaba su boca y lo torturaba. El sol achicharraba. Llevaba demasiada ropa: una chaqueta y un abrigo encima de su camisa. Tendría que habérselos quitado y llevado en el brazo, o haberlos tirado, pero no se le ocurrió. Una buena mujer que lo vio desde su ventana sintió lástima por él, y deseó que cruzase la calle para ponerse a la sombra.

El hombre giró en una calle lateral, en la que un grupo de niños ruidosos y alborotados estaban jugando. El color de la caja que llevaba los atrajo y quisieron saber qué había en ella. Uno de ellos intentó quitársela. Con el instinto de proteger su pertenencia y único sustento, resistió, gritó a los niños y los insultó. Un policía que pasaba la esquina y vio que él era la causa del disturbio, lo sacudió brutalmente agarrándolo del cuello; pero, al percatarse de que era ciego, moderó bastante sus ganas de aporrearlo y lo mandó a seguir su ruta.

Siguió caminando bajo el sol.

Durante su vagabundeo sin rumbo, giró en una calle en la que había monstruosos vehículos eléctricos tronando de acá para allá, haciendo sonar campanas salvajes y literalmente temblar el suelo bajo sus pies en su tremendo impulso.

Empezó a cruzar la calle.

Entonces ocurrió algo, algo horrible que hizo que las mujeres se desmayaran y que los más fuertes de los hombres que lo presenciaron se pusieron enfermos y se marearon. Los labios del conductor de la locomotora se pusieron tan grises como su cara, o sea de un gris ceniciento, y se puso a temblar y a tambalear del esfuerzo sobrehumano que había tenido que hacer para parar su vehículo.

¿De dónde salió la multitud tan de repente, como si fuera por arte de magia? Chicos corriendo, hombre y mujeres arrancándose de sus vehículos para ver este espeluznante espectáculo: médicos apresurándose en calesas como guiados por la Providencia.

Y el horror creció cuando la multitud reconoció en la figura muerta y aplastada a uno de los hombres más ricos, más valiosos y más influyentes de la ciudad, un hombre conocido por su prudencia y previsión. ¿Cómo había podido ser alcanzado por una fatalidad tan terrible? Tenía prisa, después de haber salido con retraso de su trabajo para reunirse con su familia, que, una hora o dos más tarde, iba a viajar a su casa de verano en la costa atlántica. Con la prisa, no se dio cuenta de que otro coche venía en sentido contrario, y la común y terrible escena se repitió.

El ciego no supo la razón del alboroto. Había cruzado la calle, y ahí estaba, avanzando y dando traspiés bajo el sol, arrastrando sus pies a lo largo del bordillo.

KATE CHOPIN - EE.UU

“The Blind Man”,
Vogue, 1897

sábado, 15 de noviembre de 2025

CHARCO DE LUNA - Luis Alposta - Buenos Aires, Argentina

 


Del libro "En esta hora" Copyright 2024 - Buenos Aires, Argentina

LUIS ALPOSTA - Buenos Aires, Argentina
MIEMBRO HONORÍFICO Y ASESOR CULTURAL DE ASOLAPO ARGENTINA

MIS PERDIDOS JUGUETES - Luz Samanez Paz - Ica, Perú

 














MIS PERDIDOS JUGUETES


En las noches,
cuando estoy a solas en mi alcoba
sabe llorar muy dulcemente mi alma.
Como cuando de niña, recuerdo todavía
mis perdidos juguetes...
esa tersa muñeca sonrosada,
que se vistió de cielos
o mi osito de felpa, con rollitos de seda
o la cristalina espuma
en que recorta, barcos de papel el río.
I es mi ilusión de dulces ojos
que puede mirarme a solas...
como los ojos de esas cálidas estrellas
i es mi ilusión que entiende
el idioma de los pájaros, aprendidos en el aire
i en las espinas de las rosas, la canción de las flores...
Ya me voy con mis pájaros perdidos,
entiendo el mensaje de la flor,
o el signo familiar i transparente
que extiende el colibrí en el aire
o el suave vuelo de roce de alas
de la mariposa loca i pintada...
que ellos también existen
i no puedo olvidarles el latido.
Lo que me brota,
no lo aprendí en los libros,
ni en el colegio,
sino en mi propio corazón de poeta,
porque yo no olvidé el roce del ángel,
ni la pureza de los niños
i caminé por la senda,
con el Hada de los Sueños.
Otros verán la tierra, en solo barro,
yo nunca olvidaré que es una estrella.
Porque la poesía va conmigo,
con su mano en mi mano
i sus pasos junto a los míos...
Porque es amor, semilla,
belleza, alegría, tristeza,
vida o muerte.


LUZ SAMANEZ PAZ – Ica, Perú

FUNDADORA y PRESIDENTE DE ASOLAPO INTERNACIONAL
Nota: Nótese el reemplazo de la Y por la i latina, proceder estilístico propio de la autora

CONCLUSIONES - Marian Muiños - España

 













CONCLUSIONES


Mi ilógica razón discurre
que ni autocompasión ni amor frustrado
son suficiente evidencia
para condenarme al llanto.

Por lo tanto,
me iré a dormir
con una lágrima asomada
y otras tantas fugitivas.
El rostro seco y seca el alma.
Pues no hay sobre la almohada
más humedad que la perdida.

Del libro”De paso por el mundo” ©2024

MARIAN MUIÑOS
– España
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

PREGUNTA - Germain Droogenbroodt - Altea, Alicante, España

 









PREGUNTA


Sobre el lienzo del horizonte
la mañana pinta las imágenes más extrañas

¿Qué sueño
parido de la noche
sobrivivirá a la luz del día?

Como espejismos
flotan nubes blancas por el cielo
haciéndose y deshaciéndose continuamente
pasan lentamente más allá

hacia algun lugar
o a ninguna parte

-quien sabe.

Del libro "El camino del ser"


GERMAIN DROOGENBROODT – Altea, Alicante, España

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

TRANSMIGRACIÓN - Liana Friedrich - Villa Regina, Rio Negro, Argentina

 












TRANSMIGRACIÓN


Volveré
desde el ángulo del sueño,
a reiterar insomnios y vigilias,
ensimismando las noches
en oscuros ramalazos
de recuerdos.
En secreto renaceré
para recomponer tristezas y alegrías
Floreciendo soles en los días
sumaré equinoccios olvidados
para reencontrarte,
prisionero en tu abandono,
junto a mi orilla de silencios.
Circundada de eternidad
volveré (lo prometo)
a encadenar las horas
más allá del espanto fugaz
de cada muerte,
con la fidelidad
del surco y de la espiga.


LIANA FRIEDRICH
– Villa Regina, Rio Negro, Argentina

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

HAY UN MUNDO MAS ALLÁ - Guillermo Fernández de Carpio - Arequipa, Perú














HAY UN MUNDO MAS ALLÁ


Hay un mundo más allá de este terrenal,
donde culminamos nuestras fugaces vidas
en un eterno y lúcido pasaje.
De ese mundo vinimos y hacia ese caminamos.
En este itinerario descubrimos, quizás desde niños,
la semilla y luego el bosque de nuestro destino.

Hay un mundo donde Cristo vive y todo es gloria y perdón,
le interesa el porvenir de cada generación, el final de su propia creación.
¡ No temo! ¡Afronto el mal del mañana!¡El bien de hoy!
¡Cristo no me ha dejado!

Hay un mundo que me espera, creo que algo tarde o temprano llegaré.
De muchos autores he sabido, que el camino de Dios no han seguido.
La obra de tales intelectuales he leído,
mi oración habla de estos hombres y mujeres,
ruego en tenue silencio en este orbe por otro orbe.

La desdicha uno se la crea, uno es el autor,
la felicidad es el mejor de los caminos. ¡Encuéntrala!
El horizonte no está tan lejano a mis ojos,
lo diviso y me apacigua,
lo describo y fortalece a mi aquietado espíritu lector.

Hay un verso más allá, de éstos que escribo.



GUILLERMO FERNÁNDEZ DEL CARPIO
– Arequipa, Perú

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

EL VUELO DEL LEOPARDO - Adrián Néstor Escudero - Santa Fe, Argentina

 








Imagen de: Mónica Goldy


EL VUELO DEL LEOPARDO


Dos morenas doncellas escapadas
del frenesí nocturno de su aldea milenaria
y adormecidas por la suave ventisca
de un montañoso y volcánico altiplano,
equilibran su sueño capturado por
dos solemnes y curvilíneos riscos,
custodiados por el inminente vuelo
de una recia mascota pespunteada y altiva,
que tutela feroz el sedimentado paisaje lunar
que las acuna, anochecido, tras un puñado
de silentes, solemnes nubes peregrinas…

Sus siluetas de cobre anochecido
se abrazan en mutua protección,
porque el risco donde han aventurado
su paseo nocturno y noctámbulo,
es todo un desafío al equilibrio
de esos cuerpos atados en un abrazo
firme que juramenta, al universo todo,
la amistad inescindible y nativa que las une.

Están felices de ser convidadas
por la brisa de lo Alto: saben que sus rezos
han sido escuchados por ocultos ancestros
y que el aire montañoso no es, sino,
el saludo refrescante de los dioses
nocturnos que esconden su rostro tras
la enhiesta faz de una luna encendida.

Y sueñan, en tanto el atlético leopardo
duda en emprender su nocturno vuelo
en ese encantador designio de apagar
una por una a las estrellas de Abisinia,
hasta destapar la noche y encender
el fuego rubio de los primeros rayos
de una infinita alborada.

Pero el deber puede más que su deseo,
y el vuelo del leopardo muere, cancelado.


ADRIÁN N. ESCUDERO, Santa Fe (Argentina), 14-10-2025.
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA

. NOTA: Poema escrito sobre la base de la obra pictórica de la artista plástica santafesina MÓNICA GOLDY (imagen adjunta), y con destino a la Muestra Ilustrada Pictórica-Literaria organizada por la SADE-FILIAL SANTA FE y la ASOCIACIÓN DE ARTISTAS PLÁSTICOS SANTAFESINOS - Acto 15 Noviembre 2025.



 


«REFLEXIONES MACHADIANAS» - Ángel Medina - Málaga, España

 




«REFLEXIONES MACHADIANAS»

                                                                     

Hay un libro al que tengo gran estima―no todos son igualmente estimables―. Se titula “Juan de Mairena” y su autor es Antonio Machado. El libro muestra las enseñanzas de Mairena a sus alumnos en clases magistrales, de diversidad monográfica y breves en las que se filtra la sutileza y finura de pensamiento del autor puestas en boca del enseñante.

 Voy a comentar algunas para que el lector pueda reflexionarlas por sí mismo.

→ “La verdad no existe” ― dice Mairena en la clase.

Esto es lo que algunos afirman. Mas, ¿puede afirmarse lo inexistente sin entrar en contradicción?

→ “Lo dulce y lo amargo, lo caliente y lo frío, un color u otro son percepciones u opiniones―esto decía Demócrito―. Sólo los átomos son verdaderos.”

Es cierto que son la médida de lo pequeño. Pero, si pensamos en el cuerpo humano, de las dos células germinales brotará una explosión incalculable de unidades de seres vivos que en versión de algunos científicos podría calcularse en trillones. Algo difícil de calcular, al igual que el recuento de las estrellas que coronan el cosmos. El hombre es un paquete de células. Sin ellas no sería. Sin embargo, ni los átomos ni las células piensan como materia. Y, siendo el hombre materia, ¿de dónde procede el pensamiento? ¿Tal vez de algo que no es materia? Y en tal caso, ¿no podría decirse que el hombre es, además de materia un ser dotado de espíritu? La prueba del algodón.

→ Dice el Deuteronomio 6,5 y el primero de los Mandamientos del Decálogo:

"Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas".

Juan de Mairena explica en la clase: “Amar a Dios sobre todas las cosas es algo más difícil de lo que parece”. Y a continuación hace el siguiente razonamiento:

1 Hay que creer.

2 Hay que creer en todas las cosas

3 Hay que amar a todas las cosas

4 Hay que amar a Dios sobre todas ellas

Reflexionemos como el eco que procede de la voz.

 ¿Qué es creer? Se dice a botepronto que es creer aquello que se nos dice. Pero, si fuese tan sencillo, por la misma razón habríamos de conceder credibilidad al que cree en los ovnis. Creer implica algo más. Y es el “seguimiento”. Quien cree no se limita a admitir intelectualmente una verdad, sino que en la medida que lo cree se adhiere a ella. Se entrega en la medida de sus posibilidades: con el corazón, con el alma y con sus fuerzas. Esto es, con todo él.

 ¿Qué son todas las cosas? Sencillamente, el conjunto de cuanto existe. La repregunta que surge de esta pregunta es ¿quién conoce “todo”? Ni siquiera aquellos que llamamos sabios pueden escapar de la ignorancia de ése saber. De ahí la frase “Sólo sé que nada sé” que pronunció el viejo Sócrates.  Se conocen “cosas”, partes de un todo, pero no el todo. Y mucho menos todo del TODO.

¿Cómo amar lo desconocido? Pues amar a todas las cosas significa entregarse a ellas. Y es bien sabido lo difícil que se hace amar a alguien o estimar un objeto, pero es más difícil entregarse (aquí no se trata ya de conocer intelectualmente, sino de entregar lo que se es) a todo cuanto existe.

Y habiendo analizado lo precedente viene el amar a Dios por encima de todas ellas. He aquí que puede inclinarse la balanza hacia un lado, esto es, anteponer a Dios al mundo y al propio “ego”. Esto sí se entiende mejor.

Mairena concluye la clase puntualizando: “En suma:  esto es la santidad perfecta, inasequible a los mismos santos”

→ Profundizando en el interior del hombre, dice el ilustre maestro: “No fue la razón, sino la fe en la razón lo que mató en Grecia la fe en los dioses”.

Cierto. Es la insuficiencia de los árboles lo que impide ver el bosque. Cuando el hombre se entrega a la razón, como no entiende al llegar a un límite, niega, afirmando lo que niega. No existe un Ser Supremo, porque no cabe en la cabeza tal afirmación. Pero esto no es lo peor, sino que al negar habrá de afirmar con la razón lo contrario. Esto es: que todo procede de la nada. Incluso él mismo. Entonces, habrá de admitir que hay efecto sin causa. Y esto es ya un choque de trenes.

→Mairena dice también: “Lo esencial del carnaval no es ponerse la careta, sino quitarse la cara”.    

El mundo es un inmenso circo donde el payaso hace reír en tanto que su corazón sangra por dentro. Vivimos demasiado deprisa y apenas nos queda tiempo para saborear lo que somos. Nadie es perfecto, pero para aspirar a serlo es necesario pararse a pensar cómo somos realmente. Y como no nos interesa el cambio―nos hemos acostumbrado a como somos―, porque nos retaría a cambiar muchas cosas, preferimos mostrar la careta de cómo queremos ser vistos.

Concluye aquí Mairena su clase hablándole a sus alumnos del fin de la vida.

→ “De la muerte, decía Epicuro, que es algo que no debemos temer, porque “mientras somos”, la muerte no es, y cuando la muerte es, nosotros no somos”

Pensamiento de incalculable valor, pero que, como todo pensamiento se abre a un más allá de ese pensamiento.

Momento difícil, porque en tanto se sigue siendo, aunque sea unida la vida a la muerte por un hilo más delgado que el grosos de un cabello, lo que se plantea últimamente no es el fin, sino la duda del comienzo. Se siente la muerte física, pero lo que el hombre teme perder es su “yo”, su verdadera identidad. ¿Habrá algo tras el velo negro que se acerca? ¿Me arrebatarán el cuerpo o el “yo”, mi espíritu, mi alma? Terrible dilema para pensarlo en esos últimos instantes. La dificultad del gusano de morera no está en brotar del capullo convertido en una mariposa, sino en tejer el capucho para envolverse en él. Yo, por si acaso, prefiero planteármelo ahora, con tiempo, cuando todavía no presiento los dedos helados que han de venir a llevarme.

ÄNGEL MEDINA – Málaga, España

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA


PEDIR LIMOSNA, SOLUCIONANDO ESPACIO - Salomé Moltó - Alcoy, Alicante, España

 




PEDIR LIMOSNA, SOLUCIONANDO ESPACIO

 

Esa mañana compré varias cosas, pues con la nevera, ya medio vacía tenía que hacer frente el fin de semana que se acercaba y si mis hijos venían a comer… El crucero por el mar mediterráneo que había realizado con el grupo de amigas, ya jubiladas todas, había sido una verdadera delicia, así que iba recorriendo, mentalmente el mare nostrum con una Grecia de gran historia, una Italia hermosa y única y... Me chocó ver a un, digamos mendigo pedir limosna, siempre en el mismo lugar.

.-¿Qué pasa, como que está usted todos los días aquí y siempre igual?

.-Pues que quiere, la gente que sale de las iglesias es poca y además a penas me dan algo.

.- ¿ y no cobra ninguna pensión o ayuda de alguna clase?

.-No, ya no me dan nada y a las personas que les pido trabajo, ni caso. Como voy mal vestido… La policía me estuvo interrogando pues parece que han robado en una empresa cerca de aquí, pero claro, si yo hubiera sido el ladrón estaría disfrutando del dinero muy lejos de aquí.

.- Esta tarde tenemos los vecinos una reunión, pues las hierbas de los jardines del patio de la Comunidad, están para cortar y está todo por regar y… bueno ya le digo si encuentro solución.

El debate en la reunión fue exhaustivo, todo el mundo aportaba “su solución”  y unos en contra de los otros y entonces yo, que me había mantenido callada salté con una “imaginada solución” Como este señor es un autónomo (ésta era la mentira) que se ocupe él de todo, además le daremos alojamiento, en ese pequeño local al lado derecho del almacén, allí que se quede, lo limpia y pinta, yo tengo un sofá y un microondas y si alguien tiene platos, cucharas y lo demás que se lo dé y que se ponga a vivir allí, él mantiene el jardín y la piscina a cambio de alojarse en ese espacio, ni le pagamos ni nos paga.

Todos saltaron con chillidos y no sé cuántas soluciones y al final se aceptó la idea, pues no tenían nada qué pagar y tendríamos el patio común arreglado.

.-Ya tiene usted trabajo, pero ya sabe tiene que hacerse autónomo, bueno viene cuando pueda a hacerme los cristales de las ventanas y yo le pago el seguro de autónomo, luego cuando encuentre algo más de trabajo ya se paga usted el seguro.

Mientras preparaba la ensaladilla rusa, para la comida de la familia iba pensando si con una buena dinámica y voluntad, yo creo que se superarían las miserias de este mundo que habitamos. O parte de ellas…


SALOMÉ MOLTÓAlcoy, Alicante, España

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA                                                                                               

UN MAESTRO INOLVIDABLE – ROA BASTOS - Roberto Alifano, Buenos Aires, Argentina

 




UN MAESTRO INOLVIDABLE – ROA BASTOS

Siendo muchacho descubrí en la modesta pero bien seleccionada biblioteca de mi madre, que era muy buena lectora de novelas, Hijo de hombre del escritor paraguayo Augusto Roa Bastos, donde retrata y denuncia la asesina, fanática y desmesurada ambición de poder del dictador Alfredo Stroessner, que él había padecido en carne propia. La obra de Roa Bastos está contada primero desde la cárcel y luego desde el exilio.

En esa época, finales de la década del sesenta, se había hecho un hábito para mí, visitar todos los sábados la casa de campo que tenía a orillas de las barrancas de El Cazador, en el pueblo de Escobar a mis recordados amigos, el psicoanalista Emilio Rodrigué y a Num, su esposa, también muy buena escritora. Prudentemente llegaba por lo general con facturas recién horneadas para acompañar el tradicional mate, que, como dice en su poema Martínez Estrada De ti a mí, mano a mano, / el mate viene y va. / El mate es como un diálogo / con pausas que llenar. / (Darío lo ha llamado. calumet de la paz)

Una tarde, encontré a los dueños de casa con visitas y acaso llegué inoportunamente. Pero allí siempre el clima era de bienvenida y fui honrosamente presentado al ya famoso escritor Augusto Roa Bastos, “Se trata de un de un admirado y gran amigo, comentó don Emilio-. Yo recordé, con orgullosa presunción, que gracias a doña Salvadora, mi madre, lo había leído. Roa Bastos ya era célebre por su primera novela “Hijo de hombre”. Don Augusto se encontraba acompañado por la que entonces era su esposa, Iris Giménez.

Don Augusto Roa Bastos ya era uno de los novelistas más famosos de la lengua española, un valiente narrador que exploró y denunció los crímenes ocasionados no solo por el déspota de su país, sino también por todas las dictaduras de nuestra América. Entre las obras de Roa Bastos tampoco se podían pasar por alto Encuentro con el traidor y otros cuentos (la ya señalada), Hijo de hombre y Yo el Supremo, con adaptación para el cine, que ofrecieron al espectador versiones acalladas por la historia, como la invasión española, las guerras del Paraguay y del Chaco, las masacres en comunidades indígenas y las formas espantosas de otras dictaduras de nuestra América. Roa Bastos, además, había publicado algunos preciosos libros de poesía y cuentos para niños con los que merecidamente obtendría luego reconocimientos internacionales: en Buenos Aires se le otorgó el Premio Internacional de Novela de la Editorial Losada con Hijo de hombre, y luego esa definitiva consagración que fuera el Premio Cervantes. Ni qué agregar que esa tarde en casa de los Rodrigué fue memorable. Augusto era un hombre ameno, con sentido del humor y rico en anécdotas que eran un placer escuchar.

Los grupos literarios en Paraguay son casi inexistentes, -me comentó con cierto desconsuelo otro amigo y compatriota de Roa Bastos, el notable poeta Cristino Bogado-. Narradores como Jorge Kanese, Edgar Poe, Douglas Diegues, Remigio Costa, Joaquín Morales y Mónica Bustos son reconocidos por pequeñas elites; pero, la verdad, poco leídos. Sin embargo, Roa Bastos nos abrió esa puerta”.

Para mí, no fue el único encuentro. A partir de esa tarde nos unió una amistad, llena de gratos recuerdos. Un par de veces almorzamos con Borges y en una ocasión visitamos a Ernesto Sabato en su casa de Santos Lugares; fui también uno de los oradores en un merecido homenaje que se le hizo en la Cancillería Argentina. En 2017, con la colaboración valiosa del escritor Armando Almada Roche, le dedicamos un número especial en la revista Proa, que reunió testimonio de Octavio Paz, Jorge Luis Borges, Nicolás Guillén, María Elena Walsh, José Donoso, Ernesto Sabato, María Esther de Miguel y José Donoso, entre otros destacados escritores de nuestra lengua española.

Augusto Roa Bastos, nació en 1917 en Asunción del Paraguay y falleció en ella, su amada patria, en 2005. Sensible y prolífico en su quehacer literario, cultivó la poesía, el teatro y el periodismo; fue, además, guionista de cine (su relato, El trueno entre las hojas, contó con su propia adaptación. Hoy se lo considera el principal maestro de la literatura de su patria, y uno de los más destacados de la literatura hispanoamericana.​​ En 1989, como he señalado, le fue otorgado el Premio Cervantes. Su admirable obra ha sido traducida a más de veinticinco idiomas.​​

ROBERTO ALIFANO – Buenos Aires, Argentina

MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA