LA CAJA
Qué llevaré conmigo cuando muera?
Acaso empuñaré alguna moneda?
El carruaje lujoso? La morada que habito?
Lo que pienso y no dije,
y callé conmigo, a mi manera
Eso, quizá conmigo venga.
La lujuria y el verso
dejaré contigo cuando muera.
Y el beso que di en mi primavera?
Dejaré la ambición y la arrogancia,
esclavitud de la soberbia?
Me llevaré el tesoro de la idea,
el goce fugaz
y el enemigo que habita en la promesa?
¡Quítame esta caja de madera
qué nada tengo que guardar en ella!
¡No asome la nariz ni el más amigo!
¡Pon la tapa… antes que me vea!
No debe haber mejor certeza
que la de estar confiado que uno deja:
el efímero llanto del momento
y la borrosa memoria del que queda.
Dos cosas cargaré cuando me muera:
lidiaré con la nada
y una imbécil caja de madera.
Quizás, algo deje cuando me muera:
un retoño en el huerto de la idea
y la utópica faena en la palabra
que alguna vez, en el papel vertiera.
Mas, por si acaso así no fuera,
dejaré por condición en mi legado,
que haya siempre un tonto que las lea
¡Quítame esta caja de madera
qué nada debo de guardar en ella!
©NORBERTO PANNONE – Argentina
Del libro “Por los soles y lunas de abril”
Ed, Buenos Aires 2000, Argentina
No hay comentarios:
Publicar un comentario