Imagen de: elcomercio.pe
“INMEMORIAN A CESAR VALLEJO”
Escuche
don César vallejo,
es usted
poeta de poetas,
ilustre,
insigne, perínclito, inmensurable,
y
recuerde el laberinto de la vida,
que deja
huellas imborrables en el mundo.
¡Oh! Don
César Vallejo
Es usted
la lumbrera cobriza de mis atardeceres
y corren
acuarelas en la tinta de sus crepúsculos.
¡Oh!,
Poeta de la inmortal llanura,
le
recuerdo en la luz de sus iluminadas devociones
y en el
perenne sol de sus sensaciones.
Le
buscare en los arcoíris de sus profundas convicciones
y en los
encantos que desbordan sus manantiales
y en el
pesar que vuelan hacia el fugaz viento.
Óigame
don César Vallejo
y
despierte para ver su gloria
y contemple los rosales de sus reflexiones
y las
maravillas de sus constelaciones.
Allá en
los universos extraviados
y en el
excelso calendario de su pecho
y en la
grandeza de sus oceánicas conclusiones
y las
revelaciones en los ecos de su aliento
y en la
desnudez de sus majestuosas rimas.
Con el
caldo veraz de sus denuestas seducciones
usted
impregno el verbo en las montañas
y las
olas que estremecieron los mares.
Usted
fue un gran soldado de la paz,
quiso
dar un beso a las injusticias pecaminosas
y logro
yacer en el corazón de hierro
y en la
ignorancia que abraza el frío de la noche
y
penetró en el tuétano de las raíces inciertas
aunque
tuvo implacables espinas
que
hieren las fibras en los costados de las hojas;
allá, en
su tierra descalza, Santiago el Chuco.
Vive
usted en la cima de la sabiduría
y en la
brisa que llega hasta mi oído
y el
pensamiento que abriga el invierno
usted,
mi don César Vallejo.
Dígame
de donde viene su inspiración infinita
de donde
provienen sus imaginaciones
y
su extraordinaria visión del tiempo
es usted
el ocaso de los mares profundos
y la
nieve que se desliza en los copos
anidando su pecho.
Dígame
quien era el mañana que le vio nacer
y la
luna que brilla en sus riachuelos
¿Quién
te dotó para ser un gran maestro?
¿Quién
te inspiro en el Olimpo de su mirada?
Fue la
divina palabra del cielo
y el
eterno río de sus compulsiones,
pero hoy
alguien pensara en usted
y dirá
las grandes verdades azules de su boca
y
viajara en la tranvía de sus razones
y
anunciará su voz en todo el mundo,
y su
paso veloz por las estrellas…
©CARLOS ASCENCIO BARILLAS, porta y escritor salvadoreño
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA
Heridas contra las piedras,a las que envió su canto,mas allá de las miserias escondidas bajo el manto...(Que tapaba , que escondía, tanto dolor ,tanto espanto...) (Frag.de "A César Vallejo"---Y.E.Solís Molina
ResponderEliminar