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“MARIO”
Mario,
hoy que
han pasado
treinta
años,
y hemos
recorrido
el mundo
que nos
separa
por
hombres
tentados
en la
carne
y en el
llanto,
por
diferencias
mezquinas
y absurdas,
por
orgullos
y
prejuicios,
de las
vanas
indiferencias.
Hoy hace tiempo,
en la
infancia
puedo
recordar
tu voz,
tu aliento
tu
mirada profunda,
y los
insignificantes,
remolinos
de
vientos
que
limpian
el polvo
de los
desiertos,
así, te
recuerdo
lejos,
muy lejos,
de la
razón
y de la
verdad,
porque
hoy
nos
enfrentamos
en los
túneles
oscuros
de tus
ocasos
y que
ahogan
nuestros
silencios,
que
triste agonía,
siente
el alma mía,
desperdiciar
la vida
para
recibir la muerte
en los
laberintos,
de la
noche fría.
©CARLOS RODOLFO ASCENCIO
BARILLAS, poeta y
escritor salvadoreño
MIEMBRO HONORÍFICO DE ASOLAPO ARGENTINA
Un desgarrador grito hecho poesía,un recuento casi póstumo de los errores que atormentan el final de la existencia,un alerta para recomenzar en Paz.
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