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LA SILLA VACÍA
Hoy hubiese deseado
que a mi mesa llegaras.
Que mis hijos dijeran
para ti, dos palabras.
Hoy hubiese deseado
compartir con tu “mate”,
esa mesa temprana
que dejara mi madre.
Hoy hubiese deseado
repartir nuestro vino;
platicar con mis hijos;
del ayer, cuando niño.
Hoy hubiese deseado
no dejar estas flores
en la seca gramilla;
ni llorar por la ausencia
que dejó tu partida;
ni advertir esa silla,
que has dejado vacía.
©Norberto
Pannone
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domingo, 16 de junio de 2013
LA SILLA VACÍA de Norberto Pannone (16 de Junio día del padre)
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Norberto Pannone, tus amigos admiramos tu importante tarea cultural que silenciosa e ininterrumpidamente, enriquece el intelecto y eleva el alma de quienes admiramos el poder de la palabra ,que eleva, enriquece y llena de gozo a quienes con la mejor buena voluntad nos servimos de ella en favor de la comunicación.
ResponderEliminarYolanda Elsa Solís.